La última actualización de OS X, la 10.9.2, ha supuesto otro paso importante para Apple: el fin del soporte oficial para Snow Leopard. Dicho sistema tiene cuatro años y medio de edad, y en estos momentos está instalado en uno de cada cinco Macs que se usan en todo el globo.
Podríamos llamar a esto un último empujón para animar a todos los que puedan a actualizarse a Mavericks, proceso que se puede hacer directamente desde Snow Leopard (siempre que el hardware del Mac lo permita) y sin pagar ni un céntimo. También cabe destacar que Snow Leopard es el último OS X con soporte para entornos de 32 bits, y si Apple lo declara obsoleto es una carga de trabajo importante de la que se liberan.
Vía | Applesfera