Llevamos meses constatando el hecho de que
Apple quiere minimizar en la medida de lo posible su dependencia de Samsung. Actualmente colaboran en muchos aspectos relacionados con los componentes necesarios para fabricar los dispositivos de
Apple. Pero tal como auguraban las noticias,
Apple reducirá el porcentaje de fabricación de Samsung para componentes como por ejemplo los procesadores para dispositivos iOS.
El próximo procesador de
Apple, el presumible “
A8” ya estará a puertas de ser producido en masa y estará todo atado para su fabricación. Pero el
A9 que llegará en 2015 verá reducido el porcentaje de fabricación del que se encargará Samsung. Presumiblemente
Samsung fabricará entre el 30 y el 40 por ciento de los procesadores, mientras que
el resto será asumido por TSMC.
El nuevo chip tendrá una arquitectura de 14 nanómetros, mientras que la versión del chip
A6 tenia una arquitectura de 32nm el actual
A7 la tiene de 28. Podemos ver la progresión en cuanto a miniaturización que están alcanzando. El
A7 está montado actualmente en el iPhone 5s, el iPad air y el iPad mini retina. Solo varía la velocidad de reloj dependiendo del dispositivo en el que se monta.
La realidad es que
dado el nivel tecnológico de Samsung, la calidad de fabricación, la infraestructura y su capacidad de carga de trabajo, hace que
desvincularse de él necesite un periodo de planificación. Poco a poco descenderá la dependencia de Apple, pero los coreanos son imbatibles en muchos aspectos.