Apple nunca ha sido famosa por ofrecer demasiadas opciones de personalización a sus usuarios y aunque
iOS 7 no supone ningún giro en este sentido, su nuevo diseño sí que ofrece una inesperada ventaja:
cambia el fondo de pantalla y todo el sistema operativo irá a juego con él. La pantalla de bloqueo, el dock, el fondo de las carpetas, el Centro de Notificaciones y el nuevo Centro de Control, todo se ve transformado por esa simple y única acción.
Y es que en contra de todo lo que hayáis podido leer, si hay un atributo que puede describir el diseño de iOS 7 no es ser plano, sino estar cargado de profundidad. De transparencias, desenfoques, animaciones y otros pequeños detalles que lo convierten en el sistema más sencillo y rápido de personalizar del mundo.
Incluso la barra de estado, ahora desprovista de su tradicional fondo negro, alterna el color de sus iconos y textos para seguir siendo claramente visible independientemente de que escojamos un fondo claro u oscuro. Y no lo hace reemplazando simplemente el blanco por el negro, sino buscando el color oscuro predominante de nuestro fondo y utilizándolo para que todo esté en armonía.
Escoge correctamente tu fondo e iOS 7 brillará con luz propia, escoge mal y los daños se verán reducidos por los iconos sencillos (menos propensos a perderse en fondos con demasiados detalles) y los desenfoques.
Dicen que para gustos hay colores y como veis en estas capturas, podemos hacer que la nueva versión de iOS sea tan colorida o sobria como nos venga en gana, de nuevo, insisto, simplemente cambiando el fondo de pantalla.
En mi opinión todo un acierto por parte de Apple y un refrescante cambio respecto a iOS 6 para el que no hay vuelta atrás. Y no lo digo con segundas… cuando se lance me costará creer que alguien que pase una semana con iOS 7 y coja otro terminal con una versión anterior no sienta como que ha vuelto a un pasado lejano, un pasado que creó escuela, pero también un pasado a superar.
OS 7 es el futuro de iOS, una necesaria renovación que seguirá mejorando con el tiempo y que promete ser la base perfecta para lo que aún está por llegar. Con el otoño a la vuelta de la esquina podéis ir haciendo acopio de fondos de pantalla para estrenar sistema cada día de la semana. ¿Mi consejo?
Buscad imágenes con degradados de color, quedan geniales.
Vía | applesfera.com
