Es un extraño momento el de estos días previos a la exposición del próximo 9 de septiembre. Algo inusual entre usuarios, fans y accionistas.
En primer lugar, pasó casi un mes desde que lanzaron la última beta de ios 9. Contra lo que suele suceder, tiene tan pocos bugs que parece que un mes es tiempo suficiente como para descansar y poder lanzar la versión definitiva sin que la gente empiece a quejarse por problemas de lentitud, batería o señal de wifi. Extraño. Tanta eficiencia es muy extraña. Pero, desde ya, bienvenida sea.
Luego el tema de los nuevos iPhone. Evidentemente las formas y colores son lo que despiertan expectativas en la gente. Este año llegan las versiones "S". Las "S" para muchos de nosotros son los teléfonos a comprar. Porque juntan la experiencia de un año con el que fuera nuevo modelo, corrigen los errores, lo lanzan al mercado y ahí andamos nosotros felices con teléfonos de altísima calidad (solo basta recordar diferencias entre 4 y 4s o 5 y 5s). Es decir, se avecinan los iPhone 6 mejorados y con novedades interesantes como el Force Touch, pero no llegan a despertar las expectativas que generan las primeras versiones.
Con respecto a las tablets, se supone que presentarán una nueva Mini y el iPad Pro, de 13". Pero parece un tema poco interesante. Francamente, yo veo tablets por todos lados. Creo que han sido en muchos hogares el reemplazo de la PC de escritorio o las notebooks, pero se supone que no generan interés. Extraño también.
Las acciones de la compañía pierden valor. No es catastrófico, pero las explicaciones son realmente sorprendentes: "Apple batió records de ventas, pero se esperaba más". "El smartwatch no ha sido el éxito que se esperaba. Solo alcanzará el 55% del mercado de los smartwatches este año".
Solo restaría agregar que hay depresión en Alemania porque obtuvieron la última copa del mundo de Brasil 2014 ganando solo por 1 a 0.
Yo creo que es una tranquilidad saludable, de una compañía que posee una línea de productos maduros y eficientes en cuanto a diseño, que ha logrado una comunión con el usuario coincidiendo lo que uno "brinda" con lo que el otro "espera" y que, curiosamente, parece transformar esa sana calma en desinterés. De mi parte, espero ansioso como siempre el 9. En cada uno de esos shows muestran algo nuevo que me hace pensar "quiero tenerlo"...
