Seguramente haya quién saca partido de ella, y haya quién la tiene olvidada. Sin embargo, aún pese a las complicaciones que supone la función entre ordenadores más nuevos y más viejos, ya que un cambio en el nuevo sistema los hace incompatibles con aquellos anteriores a 2012, y el hecho de que haya que decidirse por esa opción o por compartir con iOS, AirDrop es una de las mejores alternativas para compartir archivos. No solo lo es porque la tengamos ya instalada, o porque su uso, es realmente simple. Lo es también por la privacidad y la seguridad que ofrece a los usuarios, y es precisamente de ese proceso de lo que queremos hablarte a continuación.
Actualmente, el sistema AirDrop te permite el uso del llamado Bluetooth Low Energy (BT LE), con una conexión Wi-Fi activada para poder compartir archivos entre Macs o con iOS. Puedes compartir todo aquello que tengas guardado en tu mac con tu móvil o tu iPad, tan solo arrastrando el archivo en cuestión a la pantalla, o simplemente dando la orden desde el menú Compartir y seleccionando AirDrop como opción. Pero también puedes hacerte con lo que hay en iOS o en el otro ordenador dando la orden desde tu Mac.
Pero quizás la idea en sí misma no es nueva. De hecho, hay sistemas varios para poder compartir archivos, y la nube se ha convertido en uno de los preferidos. Pero viendo las cosas que saltan a la luz por los archivos almacenados en la nube, es muy probable que si eres un obseso de la privacidad y de la seguridad, prefieras otros métodos para compartir archivos. Y es en ese sentido en el que AirDrop marca la diferencia por tres razones:
Cuando utilizas AirDrop, se crea una identidad virtual con un nivel de seguridad 2048-bit RSA. Eso implica que todo lo que allí se almacena, en parte por el cifrado que se usa, en parte por todo lo que te vamos a contar a continuación, va a quedar inaccesible a quién quiera entrar a cotillear o a robar parte de ellos. Por otro lado, tu foto de perfil queda oculta, y tan solo se muestra (en el caso de la opción Compartir con todos) el nombre de tu equipo y el contenido que se está enviando. Así también te aseguras que no haya posibilidad de que terceros que no te interesa te identifiquen lo hagan.
La función AirDrop a diferencia de otros sistemas para compartir archivos requiere que el intercambio de estos se lleve a cabo dependiendo de la localización de los usuarios. Si no estás en el mismo rango, simplemente no podrás recibir o enviar nada. De ese modo, la seguridad y la privacidad son más difíciles de corromper, ya que necesitas por un lado a alguien cerca de ti, y por otro lado, a haberle concedido el permiso desde la aplicación para que pueda ver aquello que estás compartiendo.
La tecnología de AirDrop no pretende ser la solución a todos nuestros problemas a la hora de compartir archivos. Pretende serlo solamente a nivel local, en ciertos casos contados, y muy probablemente con el objetivo de hacerlo con gente de nuestro entorno. Eso sí, garantizando la seguridad y la privacidad por encima de todo lo demás. No es una competencia a la nube, pero sí desde luego una opción mejor si se dan las circunstancias idóneas como puede ser la oficina de trabajo, compartir entre nuestros propios dispositivos, o mandarle algo a un amigo con el que compartimos espacio en ese momento.
[TUTORIAL]
Como usar AirDrop
