Como bien sabrás, uno de los principales atractivos del nuevo iPad es la incorporación de la llamada tecnología Retina Display en sus 9,7 pulgadas de pantalla.
Pero llevar la nueva densidad de píxeles no fue trabajo fácil, ya que teniendo en cuenta las dimensiones del panel, multiplicar por cuatro el número de subpíxeles produciría desenfoques en la imagen y distorsión en los colores. ¿La solución? Hacer uso de una tecnología llamada SHA (Super High Aperture), una técnica que consiste en elevar la altura de los píxeles (3 micrómetros en este caso) gracias a un capa de resina acrílica, con la idea de evitar cruces con las señales eléctricas que se encuentran por debajo. ¿Y todo esto es obra de Apple? Pues no, la llamada SHA tiene su origen en los laboratorios de Sharp y JSR (un fabricante de componentes para pantallas), y actualmente está en más del 25% de pantallas del mercado, quizás no para aumentar la densidad de sus píxeles, pero sí conseguir otra serie de mejoras que ofrece, como por ejemplo aumentar el brillo y el contraste de la pantalla.
Vía | engadget.com